El agua es fuente de vida.
El agua proporciona placer y bienestar por sus propiedades relajantes y terapéuticas. El agua ayuda a realizar tratamientos para paliar diversas enfermedades y sobre todo en la gente de edad avanzada.
El agua proporciona placer y bienestar por sus propiedades relajantes y terapéuticas. El agua ayuda a realizar tratamientos para paliar diversas enfermedades y sobre todo en la gente de edad avanzada.
Existen muchos y diversos tipos de agua minero-medicinal, y su grado de
mineralización y composición no es igual en todas ellas. Sus
características químicas y su temperatura varían dependiendo del
manantial de donde proceda. Ya sea ingiriéndola o en forma de inhalaciones, baños, lodos,
chorros o saunas, el agua es muy beneficiosa para el cuerpo humano. Una terapia utilizada desde hace muchos siglos
y cuyos beneficios están ahora al alcance de todos a través de los
balnearios que cuentan con aguas azufradas o sulfurosas.
Barros del mar muerto, algas, hidromasajes, saunas húmedas y secas,
baños termales, tratamientos de hidroterapia, masajes bajo ducha
combinados con masajes manuales, masajes con chorros que dirigidos por
el experto alcanzan a todos los puntos del organismo y tratamientos con
fangos, parafinas y distintas modalidades de duchas. La lista de
aplicaciones de la balneoterapia continúa creciendo, lo que no deja de
ser curioso cuando hablamos de uno de los recursos medicinales naturales
más antiguos.
El agua tiene multiples beneficios y es buena para, entre otras cosas:
- los tratamiento de los dolores articulares y musculares, reuma, artritis, artrosis, ..
- las enfermedades de la piel como psoriasis, dermatitis atópica, etc..
- relajar los músculos con un efecto sedante
- alivia todo tipo de dolores
- la cicatrización de la piel por su alto contenido en azufre
El programa de Termalismo Social del Ministerio de Trabajo permite a los mayores participar de los beneficios que para la salud tienen estas aguas con estancias durante todo el año en balnearios.